Todo largo recorrido empieza con un primer paso. Pero también es cierto que todo lo que empieza tiene un final. Pues bien, este año cuando las calles se adornen con banderas y farolillos multicolores, cuando las luces de las máscaras se enciendan, cuando el redoblar de una caja, el golpe seco de un bombo, el tintinear de un platillo o el rasgueo de una guitarra marquen los ritmos que dan vida a febrero, este año no estaré yo para cantarlo.
Esa sensación que se apodera de ti cuando minutos antes de una actuación estás dando ánimo a tus compañeros, esos abrazos cuando has terminado porque has dado lo que tenías dentro o ese disfrutar en las tablas mientras Alonso da sus golpes de caja, David Masero baila como nadie, Joselito con su bombo este año estrenado, el Palma con su grandeza sonriendo, el Pincho en su retorno con sus puntos, el Pero con sus ganas de carnaval, Moisés con sus cancioncillas chillonas haciéndome reír, Juan Antonio con su saber estar, Sixtocon su ritmo bailando recién descubierto, Juanma con su arritmia y falta de oído pero su compromiso, y Juanjo con su ilusión; pues esa sensación no la viviré este año, ni yo ni todos ellos.
Lo que en septiembre empezó en octubre acaba, y es que cuando no puede ser, no puede ser y además es imposible. Eso es lo que nos ha pasado este año, y por ello no estaré en febrero con las venas del cuello hinchadas mientras canto un pasodoble. Pero ahí estaré para que cuando todo se solucione volver a sacar mi guitarra de la funda y diga, señores callarse que vamos a empezar.
Esa sensación que se apodera de ti cuando minutos antes de una actuación estás dando ánimo a tus compañeros, esos abrazos cuando has terminado porque has dado lo que tenías dentro o ese disfrutar en las tablas mientras Alonso da sus golpes de caja, David Masero baila como nadie, Joselito con su bombo este año estrenado, el Palma con su grandeza sonriendo, el Pincho en su retorno con sus puntos, el Pero con sus ganas de carnaval, Moisés con sus cancioncillas chillonas haciéndome reír, Juan Antonio con su saber estar, Sixtocon su ritmo bailando recién descubierto, Juanma con su arritmia y falta de oído pero su compromiso, y Juanjo con su ilusión; pues esa sensación no la viviré este año, ni yo ni todos ellos.
Lo que en septiembre empezó en octubre acaba, y es que cuando no puede ser, no puede ser y además es imposible. Eso es lo que nos ha pasado este año, y por ello no estaré en febrero con las venas del cuello hinchadas mientras canto un pasodoble. Pero ahí estaré para que cuando todo se solucione volver a sacar mi guitarra de la funda y diga, señores callarse que vamos a empezar.
6 comentarios:
Pues, si. Esta es la cruda realidad y es que creo que este año habiamos puesto mucha ilusión en el proyecto 2010, dada la buena, aunque escueta, impresión del año pasado. Quizas vi desde el principio que este año el personal estaba cortito de ganas y que tirabamos palante con la esperanza de que a medida que transcurrían los ensayos la gente se fuese contagiando de Don Carnal. Pero no ha sido así y analizandolo friamente, es mejor cortar ahora que seguir tirando del carro cuando no todos tiran en la misma dirección, que parece que no pero cansa y agobia mucho... Todavía no me lo creo y la otra noche, mientras estaba con Diego seguia dandole vueltas a un pasodoble para cuadrar las rimas... Pues habra que guardar los chascarrillos intemporales para el 2011 y olvidarnos de aquellos de noticias actuales pues estarán desfasados para el año que viene, aunque podremos modificarlos. Lo dicho....entre las piernas tengo un chorizo, como decía la hirigota del Love.
Efectivamente amigo, además como decía Juan ANtonio, muchos serán irrecuperables para el año próximo, por lo que tenemos más de un año para ir buscando personal.
ánimo y otro año será, vendran muchos si dios quere, un saludo desde la comparsa de valverde.
Siempre queda la callejera que con 4 gatos se sale y se calma el mono
no sé, yo de vosotros lo intentaría
La vida Roberto, la vida.
Este año el personal esta desanimao, debiera ser lo contrario en carnaval. Este se hace para dar caña y ¿ Habra mas motivos de caña , que lo que tenemos encima ?.
Bueno un saludo y que aun sigo escuchando las grabaciones del Ciecema.
Queridos amigos almonteños-chirigoteros;
Desde Baza con amor, leo apenado la triste noticia de vuestro enclaustramiento chirigotil;
El Carnaval pasado, tras haber sufrido yo la pena durante dos años de no subir a unas tablas para cantar y tocar con mi guitarra pasodobles y cuplés, tuve la oportunidad de compartir con vosotros unos ratos inolvidables, y lo mejor de todo, el descubrir a nuevos amigos con quien compartir futuros ratos rocieros.
Pues bien, mi Chirigota accitana, la cual tenía totalmente abandonada, una vez más me reclamó en septiembre que volviéramos a montar algo; evidentemente, ellos tienen mucho más mono que yo tras ya llevar 3 febreros parados, hasta que surgió lo que ahora os propongo que intentéis vosotros: ¿porqué no montamos una antología accitana-gaditana? Ciertamente, y creo que no es una locura, podríamos recuperar un repertorio de lo mejor en mi larga trayectoria carnavalescas (16 años dieron para mucho) y así al menos, mataríamos dos pájaros de un tiro: matar el mono y no calentarte la cabeza con novedades.
¿Porqué no os lo planteáis así también vosotros? Piénsalo Roberto; por experiencia te digo que tras un parón, es muy, muy, muy difícil volver a arrancar.
Desde Baza con añoranza, el Niñato
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